LA DANZA BALEAR AVANZA HACIA LA PISTA DE DESPEGUE
Concluye el Festival Palma Dansa en Mallorca, que este año apadrinó el nacimiento de la Asociación Balear de Danza. Te lo contamos…
Texto_OMAR KHAN
Mallorca, 6 de mayo de 2021
Prosigue hasta el 9 de mayo el Festival Palma Dansa en Mallorca. Hubo aplausos y cálida ovación para Janet Novás y Daniel Abreu la semana pasada. También para la reposición de nOu (en la foto), propuesta infantil de Mariantònia Oliver que se vio el domingo en la Fundación Miró. Se espera con cierta expectación a Roser López Espinosa, esta noche en el Teatro Principal, y a Marcat Dance, de Jaén, el próximo domingo. A pesar de las medidas de seguridad y la situación delicada, el público de Mallorca se ha volcado. Es la señal más importante que ha apuntado la comunidad de la danza balear que, finalmente, empieza a organizarse.
Celebrando su undécima edición, el festival auspiciado por el Ayuntamiento de Mallorca es un referente, un evento que permite la llegada de información y contribuye a familiarizar al público con la disciplina. Y este año también ha sido el marco que ha albergado las actividades de arranque de la APDIB (Asociación de Profesionales de la Danza de las Islas Baleares) con unas Jornadas que reunieron el fin de semana pasado a la gente de la danza balear alrededor de mesas de trabajo, talleres, conferencias y asesorías lideradas desde FECED, la federación nacional de empresas de danza. Es un primer paso pero no el único que piensan dar desde la novísima APDIB, que tiene como presidenta a Catalina Carrasco, directora de la compañía Baal, y como vicepresidenta a Mairantónia Oliver, pilar histórico de la danza contemporánea balear.
“Ya no estamos tan solos”, asegura convencida Carrasco. “Nos encontramos tres o cuatro generaciones de gente de danza en las islas. Son muchos los que se han ido pero están volviendo gracias a residencias y posibilidades de coproducción. Hay más tejido, y eso nos ha llevado a juntarnos para ver quiénes somos, en qué puntos estamos de acuerdo y ver qué opciones tenemos si vamos juntos. Quién está aquí, quién va y quien vuelve, qué pasa con la danza balear y sobre todo qué falta, son las inquietudes que nos llevaron a reunirnos en asociación”
Circuito balear
Carrasco está convencida de que el primer escollo a esquivar es el de la movilidad, apostando por un circuito balear que permita a las compañías girar por las islas. La insularidad pesa pero no debería ser impedimento. “Hay profesionales y espectáculos pero no una programación estable ni un circuito que nos permita mover nuestras propuestas por toda la Comunidad”, asevera. “Es complicado al ser islas. Lo que ocurre siempre es que cada compañía consigue girar en su propia isla y lo que hay es que trabajar para que todo fluya, que haya cercanía entre artistas, gestores, programadores e instituciones”.
Algunos de los factores para la consolidación y éxito de una comunidad balear de danza ya están. Habría que hacerlos más fuertes, eficaces y asertivos. El Festival Palma Dansa, en su undécima edición parece retomar parte del empuje que había perdido. Debería seguir creciendo, trayendo información aún más relevante e innovadora, y siendo ventana de proyección para la danza local, así como también plantearse una alianza con los ayuntamientos de las islas que le permita mover el festival desde Mallorca hacia el resto, una fórmula que ha demostrado su éxito en Canarias con la iniciativa del certamen Masdanza, que hoy se mueve simultáneamente por todo el archipiélago. También debería luchar por tener mayor visibilidad y plantearse una estrategia más agresiva para seducir al público.
Son estimulantes las iniciativas de producción del Teatro Principal, de Mallorca. Este año, Baal estrenará allí su nueva creación Baalconing, y Mariantònia Oliver retomará La continua, una creación histórica de su compañía que vuelve reformulada en la celebración de sus 30 años de actividades. Pero estas producciones deberían tener larga vida y poder girar más por las islas y la península. La creación local necesita ganar proyección.
Hay problemas de mayor calado como la falta de centros de formación superior o la mejora de las ayudas y subvenciones públicas, en los que a más largo plazo APDIB puede incidir, pero por lo pronto debe ocuparse de una consolidación que le permita ser fuerte, ir todos a una y en la inmediatez, seguir disfrutando, hasta el 9 de mayo, de la oferta del Festival Palma Dansa, este año nada desdeñable.
